viernes, 9 de marzo de 2007

Primer Estegosaurio de Europa

Hace 150 millones de años el Atlántico no era el océano que es ahora, sino un mar poco profundo que varias especies no marinas lograron atravesar. Eso indican los fósiles de esa época que, perteneciendo a la misma especie, se han hallado en América y Europa. Uno de tales fósiles euroamericanos acaba de ser presentado ahora a la comunidad científica: un estegosaurio desenterrado en Portugal por paleontólogos españoles y portugueses. "Es una especie típica en América, uno de los dinosaurios icono, de los que aparecen en las películas. Y es la primera vez que se encuentra en Europa", señala el primer autor de la investigación Fernando Escaso (Universidad Autónoma de Madrid).

Una peculiaridad del trabajo, publicado en la revista Naturwissenschaften (versión electrónica), es que los paleontólogos se hacen acompañar esta vez por expertos en geofísica, que aportan pruebas de que efectivamente debió de existir, "con muy alta probabilidad, un corredor episódico" entre las masas de tierra ibéricas y el hoy continente americano. "El descubrimiento del Stegosaurus portugués y las evidencias de la geotectónica favorecen un escenario que incluye contactos episódicos de fauna entre las masas de tierra del Atlántico Norte" hace entre 148 y 153 millones de años (en el Jurásico superior), escriben los autores.


Hasta ahora se había encontrado a ambos lados del Atlántico varios dinosaurios, cocodrilos, aves y plantas emparentadas, pero "los investigadores se limitaban a presentar el hallazgo y decir que eso debía de indicar la presencia de un corredor en el Atlántico que se abría", dice Escaso. También había habido varios anuncios de dinosaurios estegosaurianos en Europa, que más tarde se rechazaron.

Los fósiles ahora hallados en Portugal pertenecen a la especie Stegosaurus ungulatus y constituyen la "primera evidencia incontestable de un miembro del género Stegosaurus fuera de América del Norte", según los científicos.

El estegosaurio fue un dinosaurio herbívoro, con la columna vertebral ribeteada de unas placas puntiagudas que lo han hecho famoso. El ejemplar hallado en el yacimiento de Casal Novo (Batalha), medía cerca de cinco metros y era, por tanto, pequeño para la especie. Fue hallado en 1999, mientras se hacía una obra en un camino; la zona es rica en fósiles de dinosaurios y un aficionado alertó al Museo de Lisboa tras encontrar un diente.

1 comentario:

Anónimo dijo...

lo que yo queria, gracias